Maciel González entró a la casa de la víctima e intentó llevársela a la fuerza. Estará preso solamente un mes.
Maciel Carlos González sabe desde fines del año pasado que no podía estar a menos de 200 metros de su expareja, quien lo había denunciado por violencia de género. Pero, así y todo, violó esa orden del Juzgado de Familia de Villa Mercedes el miércoles 11, allegándose a lo de la mujer y amenazándola, según denunció. Y una semana después volvió a hacerlo, pero esa última vez fue mucho más lejos.
Discutió con ella, quería que se fuera de su casa de Villa Mercedes para llevarla a su domicilio de Justo Daract y, como no lo logró a los gritos, trató por la fuerza: la atacó a escobazos y también intentó ahorcarla. Cuando el personal del Comando Radioeléctrico lo detuvo, descubrió, además, que le había robado ropa a su ex. Este miércoles, la jueza de Garantías Mirta Ucelay lo envió a la Penitenciaría por los próximos 30 días.
El hombre de 26 años quedó imputado por "Lesiones doblemente agravadas por mediar violencia en concurso ideal con robo", precisó la fiscal instructora Daniela Torres. La letrada explicó que el delito por desobediencia de la orden judicial de prohibición de acercamiento, expedido por la jueza Lorena Báez, no fue incorporado porque no fue notificado debidamente en su momento.
González fue detenido el miércoles 18, pasadas las 16:30. Un rato antes, el imputado se presentó en la casa de su expareja por la calle Belgrano. Entró a la vivienda por un ventiluz.
"Hubo un intercambio de palabras con la víctima, él le quitó el monedero porque quería llevársela de ahí", comentó una fuente, de acuerdo a lo relatado por la damnificada.
Luego todo se tornó más violento. Hubo un forcejeo que terminó cuando el hombre tomó una escoba y comenzó a pegarle a la mujer en distintas partes del cuerpo. "Ella tenía excoriaciones, rasguños en el abdomen y una pierna, también le tironeó el cuero cabelludo y tenía marcas de ahorcamiento en el cuello", describió el informante.
En eso que Guzmán la agredía, un vecino, alguien afuera, advirtió lo que pasaba y llamó al 911. A los pocos minutos vieron al joven salir de la casa de la víctima.
En un nuevo llamado al Centro de Operaciones de la Policía, los vecinos les señalaron a los efectivos cómo estaba vestido el agresor y por cuáles calles se dirigía.
Fue cuestión de minutos para que los patrulleros del Comando Radioeléctrico aprehendieran a González en inmediaciones de Entre Ríos y Belgrano.
De acuerdo a lo que reveló otra fuente, poco antes de ser detenido, un par de efectivos de la Policía Ciudadana intentaron identificar al imputado, pero al momento el joven "se ofuscó y trató de darse a la fuga".
Cuando lo requisaron descubrieron que en su mochila tenía dos remeras de su expareja.
