El chofer de colectivo reconoció haber abusado de la chica y un tribunal aceptó la pena acordada entre el fiscal y la defensa.
Eso que Fernando Urquiza negó las veces que declaró ante el juez Jorge Pinto, hace casi tres años, cuando fue indagado, lo reconoció ante el tribunal de Concarán que lo juzgó esta semana. Admitió que el 6 de enero de 2018, en uno de los viajes que hacía como conductor de un colectivo de Merlo, violó a una pasajera de 16 años.
Lo reconoció como parte de su solicitud para que el debate oral al que debía ser sometido sea admitido como un juicio abreviado y que la condena fuera de seis años de cárcel, tal como el fiscal y el defensor habían acordado. Tras un cuarto intermedio, los jueces Sandra Piguillem, María Uccello y Juan Manuel Saá Zarandón hicieron lugar a su pedido y lo sentenciaron.
El acusado fue denunciado en diciembre de 2018 por la madre de la víctima, varios meses después del ataque, cuando la adolescente se animó a contar lo que había sufrido.
Todo salió a la luz porque la chica se quejaba de un dolor en el cuerpo y la denunciante le hizo notar que hacía tiempo que sufría ese malestar físico. Fue entonces cuando la adolescente le contó que todo comenzó el Día de Reyes pasado, cuando un chofer de la empresa de colectivos Zenibus la había violado. En ese entonces la víctima ya estaba quebrada emocionalmente, porque hacía poco había perdido a un familiar que significaba mucho para ella.
De acuerdo a lo que la adolescente relató en la Cámara Gesell, el abuso ocurrió entre las diez y las once de la noche en la zona de Cerro de Oro. Dijo que el hombre se desvió del recorrido habitual, estacionó en un lugar apartado de la vista de la gente y, luego, la sometió sexualmente.
Después de producir la prueba, Pinto ordenó la detención de Urquiza en septiembre de 2019. A los pocos días, el 30 de ese mes, lo procesó y le dictó la prisión preventiva por "Abuso sexual con acceso carnal, agravado por causar grave daño en la salud física o mental de la víctima".
Anteayer, el fiscal Néstor Zudaire y el abogado del acusado, Marcos Juárez, solicitaron que el debate sea llevado a cabo como un juicio abreviado, es decir, aquella modalidad en la que la Fiscalía, la defensa y el acusado se ponen de acuerdo en la solicitud de una pena y evitar así la etapa del juicio oral para no extender más el proceso. Requirieron una condena de seis años por "Abuso sexual con acceso carnal", es decir, sin el agravante por el que fue procesado.
Como requisito fundamental de tal solicitud, Urquiza reconoció la comisión de la violación, informaron los voceros del Poder Judicial. Luego, Zudaire ratificó lo planteado por la defensa y señaló como atenuantes la ausencia de antecedentes penales del acusado, y como agravantes, el modo de comisión del delito.
Sobre el cambio en la calificación, explicó que, de acuerdo a las averiguaciones, no surgió que el estado de salud mental de la damnificada se haya agravado como consecuencia del ataque.
En la audiencia estuvo la víctima y, antes de que el tribunal pasara a deliberar la admisibilidad del juicio abreviado, le consultaron si estaba de acuerdo con tal sentencia. "Me parece poco. Pero si es lo que se va a dar, está bien. Espero que se den los años que correspondan y que, por lo menos, pueda reparar un poco todo lo que yo pasé", expresó la joven.
