Un futbolista denuncia la falta de avances en la investigación de su agresión durante un partido y la falta de rehabilitación prometida por la dirigencia de su club. La familia convoca a una marcha para el 31 de marzo a las 19 en busca de justicia.
Daniel Garro sufrió una agresión el 5 de noviembre mientras celebraba un gol durante un partido entre Atlético Concarán y EFI Juniors. Tras recibir un codazo en la nuca, el futbolista pasó 12 días en terapia intensiva y permaneció internado hasta mediados de diciembre.
Cuatro meses después del ataque, Garro utilizó sus redes sociales para denunciar la falta de avances en la investigación del caso y la falta de rehabilitación neurológica prometida por la presidente del club "Tricolor", Laura Sánchez.
En su publicación, Garro expresó su deseo de recuperarse y volver a su estado anterior: "Quiero sacarme este peso de encima porque los creí otra gente, estuvieron conmigo solamente para vender y salir por todos lados. Solamente pido una buena rehabilitación neurológica".
La pareja de Garro, Lurdes Moran, también se mostró indignada por la falta de cumplimiento de las promesas de la dirigencia del club: "Le prometieron una rehabilitación en un centro neurológico y jamás llegó ese día".
Karen Garro, hermana del futbolista, se unió al reclamo de la familia: "Nadie nos escucha ni se hace cargo de lo que le está pasando a mi hermano. Queremos justicia, que paguen lo que le hicieron".
Ante esta situación, la familia de Garro está organizando una marcha para el 31 de marzo a las 19 en busca de justicia. La concentración se llevará a cabo en la Iglesia Catedral y se dirigirá al Poder Judicial.
