El juez entendió que Pablo Felipe Tapia actuó en legítima defensa, al apuñalar a un delincuente que ingresó a robar al centro educativo el 16 de febrero.
El viernes pasado, el juez Marcos Flores Leyes ordenó la liberación de Pablo Felipe Tapia, el sereno de la Escuela Especial Nº 9 Apadis que apuñaló a Cristian Abraham Garrido Díaz, causándole la muerte. El juez consideró que Tapia actuó en legítima defensa cuando Garrido Díaz ingresó al predio de la institución educativa hace una semana con la intención de robar. La decisión del magistrado se basó en la investigación realizada por la fiscal de instrucción N° 4, María del Valle Durán, quien concluyó que "surgen claros elementos de la existencia de una causa de justificación siendo ésta el de la legítima defensa privilegiada".
Inicialmente, la fiscal había atribuido a Tapia el delito de "homicidio simple", lo que dio lugar a la investigación penal preparatoria. Sin embargo, luego de recibir declaraciones de vecinos, familiares del acusado, policías, testigos del hecho e informes forenses, Durán concluyó que Tapia actuó en defensa propia.
El juez Flores Leyes también dictó que Tapia, originario de Chile, no puede abandonar la provincia hasta que se resuelva la instancia de su sobreseimiento definitivo. Además, solicitó que se notifique a los familiares de la víctima para que puedan hacer alguna objeción o manifestación sobre el caso.
Durante la investigación, se constató que Tapia y su familia viven en el predio de la escuela desde 2018 y tienen un contrato que establece que deben cuidar y mantener el lugar a cambio de la vivienda. Un familiar de Tapia afirmó que debido a los numerosos robos que habían sufrido, incluso uno perpetrado por Garrido Díaz antes de este incidente, era normal que tuvieran algún elemento para defenderse. Además, se comprobó que el día del homicidio, los vecinos alertaron sobre la presencia de una pareja sospechosa merodeando por el predio con un bolso gris.
El 16 de febrero, Garrido Díaz ingresó a la APADIS con la intención de robar y se encontró con Tapia, quien había salido de su casa con un cuchillo al escuchar ruidos en el predio. Se produjo un forcejeo entre ambos y Garrido Díaz resultó herido. Tapia llamó al 911 para informar que tenía a una persona herida que había ingresado al lugar. El informe forense determinó que la puñalada de defensa fue perpetrada estando el agresor y Tapia cara a cara y que Tapia presentaba una lesión en la zona abdominal izquierda. Se verificó que el ladrón había ingresado al predio a través de un orificio en el cierre perimetral, mientras que la iluminación en el lugar era escasa.
