Molina se encuentra en prisión preventiva y enfrenta un pedido de pena de 15 años de cárcel.
Juan Ramón Molina, un oficial de la policía, comenzó a ser juzgado por abuso sexual contra la hija de su expareja, quien tenía 12 años en el momento de los hechos en 2020.
En la primera audiencia, decidió no declarar, mientras que la madre de la víctima, el padre de la niña y una psicóloga que entrevistó a la menor declararon.
La defensa del oficial, Karina Mantelli, solicitó la nulidad de la Cámara Gesell realizada a la víctima, argumentando que la pericia no estaba refrendada por las autoridades permitidas para hacerlo y no tenía datos importantes. La fiscalía rechazó el planteo y el tribunal constituido por José Luis Flores, Jorge Sabaini Zapata y María Eugenia Zabala Chacur rechazó la nulidad de la prueba.
La madre de la víctima narró que su hija reveló los hechos el 17 de mayo de 2021, dos meses después de haberse separado de Molina debido a las infidelidades y violencia de género que fueron denunciadas en dos ocasiones. El padre de la niña, quien hizo el mismo descargo que su expareja, manifestó su impotencia por no haber estado en ese momento para defenderla.
La hija de la expareja de Molina relató durante la Cámara Gesell cada una de las situaciones a las que presuntamente la sometía mientras su madre se ausentaba por trabajo. Pudo contar detalles explícitos de lo sucedido sin tener signos de fabulación, demostrando signos de hipervigilancia, donde dio detalles de situaciones que se daban de manera crónica. No pudo hablar antes de los abusos por miedo, ya que el oficial tenía un arma.
Molina tendrá la oportunidad de dar su versión de los hechos en la mañana siguiente del juicio. El juicio se encuentra en curso y se espera que se dicte sentencia en los próximos días.